sábado, 6 de octubre de 2012

y qué?

HOla Diego, no sé de qué son esos pensamientos repetitivos que después de cuatro años de felicidad comienzas a tener de nuevo. Normalmente sobre algo que crees tienes que solucionar y piensas que la solución está en tu cabeza, no en tus actos o en saber qué hay en tus sentimientos. No temas volver atrás, a veces puede pasar un tiempo, un tanto, pero tú conoces el camino de vuelta. Ya sabes esquiar, te puedes caer alguna vez, pero no olvidas cómo se esquía. Lo difícil fue aprender la primera vez. Resuleve el tema concreto que te preocupa y sigue adelante o, lo que a veces es mejor aún: sigue adelante sin resolver el tema que te preocupa. En ocasiones, nos paramos a valorar la piedra en el zapato, o la falta de luz suficiente en el cielo, y dejamos de vivir por ello, dejando de ver todo lo que sí tenemos. En ocasiones, el aprendizaje es, precisamente, dejar pasar, no dar importancia, seguir adelante. No resolverlo todo, aprender a decir no pasa nada, o qué más da. En ocasiones el aprendizaje es: me he equivocado y qué, o no sé resolverlo y qué, o no soy como soy y qué. Seguimos? Esa es la respuesta. El mundo es siempre imperfecto, o siempre perfecto. Depende de nosotros. Un abrazo, Estela.

jueves, 6 de septiembre de 2012

Se levantó y anduvo

Anónimo dijo... Hola Estela, despues de estar unos días bastante bien, hoy he estado tentada de recaer. La diferencia es que hoy me he negado a quedarme en la cama, he entrado en internet y he encontrado tu blog. He leido muchas entradas, las que creo que más me convienen ahora mismo. El caso es que he "entendido todo" y he sentido el impulso de escribir. Lo quiero compartir con todos. Bueno la verdad es que no me siento con fuerzas de dejar de ser anonima del todo, por eso no lo mando a tu e-amil. Lo siento, ahi lo dejo: Hoy es un día decisivo porque he decidido reconocer que estoy enferma, que tengo depresión. Seguramente desde hace muchos años, con épocas mejores y peores y no hay culpables. Mi madre y su cáncer no son los culpables y yo, tampoco. Yo soy la que la sufre. Hoy también he decidido reconocer que no estoy loca, que lo que pasa es que me fijo en el dolor, me recreo incluso en él. Y a veces me gusta tentar al miedo y lo reto. estoy paralizada si, pero porque yo me paralizo. Por tanto, también esta en mi mano avanzar. Es una de las mejores revelaciones que he tenido en mi vida, creo que es la que me va a llevar de vuelta al camino. Por último, hoy he decidido que voy a salir de esto. Ahora que he encontrado algunas herramientas lo voy a intentar. Tengo que auntoimponerme una rutina de nuevo, volver a hacer cosas, a crear y a estudiar. Volver a sentirme fisicamente casada, volver al gimnasio. Pero sobretodo, volver a imponerme nuevos retos , volver a pensar en pasado mañana, para darle sentido al tiempo. No estoy feliz, pero estoy tranquila y satisfecha conmigo misma, porque soy fuerte. Siempre lo he sido.

viernes, 9 de marzo de 2012

curso de autoestima

Por si a alguien le interesa, os cuento, compañeros de camino, que voy a impartir un curso de autoestima el sábado 17 de marzo, en Madrid.

Si alguno estáis interesado en asistir, y de paso conocernos, escribidme a mi dirección de correo, de forma no anónima esta vez estelaalvarez35@yahoo.es

Dura siete horas, de diez de la mañana a seis de la tarde, con una hora de descanso para comer. Será del mismo estilo que este blog, enseñanzas, vivencias, aprendizaje cada uno desde su interior y su momento. No es gratis, ni tampoco caro. Además, la inversión en salud y autoconocimiento es la mejor que podemos hacer.

Lo hago por primera vez, por aprender a enseñar en persona, y transmitir aquello que sé que se puede lograr, mirandoos a los ojos, esta vez. Tendré un psicólogo/coach ayudándome ese día. Apenas gano dinero con ello, nunca ha sido mi objetivo, pero gano mucha paz y satisfacción.

Adelante, siempre adelante. Se puede.

"Las personas con alta autoestima no necesitan compararse con los demás. Su alegría radica en quienes son y no en tratar de ser mejor que otro", Nathaniel Branden.

"La persona más influenciable con la que hablarás todo el día eres tú. Ten cuidado entonces con lo que te dices a ti mismo", Zig Ziglar.