miércoles, 19 de mayo de 2010

LA ESENCIA NO SE PUEDE PERDER

Hay algo en tu interior que no cambia nunca, es tu esencia, y lo que vales forma parte de ella.
Todos tenemos el mismo contenido puro e inmutable. Seas espiritual o no, esto es una verdad que está fuera de todo juicio y tiempo. Llévatelo a la moral y la ética si lo trascendente no va contigo, el mensaje es el mismo:

Nuestro interior es bueno, es invariable, nadie nos lo puede quitar, ni nuestro pasado, ni nuestras circunstancias; nada.

No olvides esta idea, pues te dará la pista para sentirte tranquilo de que al final de todo lo que ves en ti, siempre hay algo bello y bueno, es tu esencia y no se puede perder. Quizás tú no la veas ahora, quizás ya la distingas, pero no del todo. No importa, si te quedas quieto, tranquilo, en silencio, ella sigue ahí, y dice que tú como todos, estás hecho de algo terriblemente válido.

A partir de ahí, no olvides que tu vida la dibujas tú. Conociendo todo lo que puedas sobre las tendencias de tu caracter, de tu pensamiento, sobre tus gustos y deseos, sobre tu mundo interno, sobre las materias que te preocupan, sobre cómo es y se desarrolla el ser humano, manejarás mejor y comprenderás mejor la vida, y con ella a los demás y a ti mismo.

De nuevo, a partir de ahí, dibujarás una vida que lleve tu nombre. Ninguna es perfecta, ninguna es lineal, eso es algo a no olvidar de la realidad. Pero todas son buenas y válidas, la tuya, la que más.

martes, 4 de mayo de 2010

Haz terapia de grupo y no sólo de grupo

Nuestro interior es una parte fundamental de nosotros. Tenemos que tomar conciencia de ello y no vivirlo como algo sin un rumbo ni una explicación. Hay mil maneras de llegar a él, de saber qué es lo que nos pasa, cómo vivir o aceptar o cambiar lo que nos pasa.

Mejorar la seguridad personal, saber enfrentarnos a la soledad, a la tristeza, no sentirnos extraños en un mundo de fuertes. A todo el mundo le pasan cosas en su interior, en realidad, es la zona más común a las personas. Igual que por lo general todos tenemos dos brazos, todos tenemos emociones, alegrías, momentos duros. Saber eso nos da también una sensación de integración en el mundo que la persona deprimida no suele tener, ya que se siente distinta para peor, se siente no tomándose o reaccionando ante la vida de la manera adecuada, involuntariamente.

La manera adecuada no está escrita en parte alguna. Lo que sí está claro es que necesitas salir de ahí. Estudiar y conocer para comprender te ayuda. Ser consciente de que no eres tan raro como te crees, también.
En las terapias de grupo, en los grupos de encuentro, en los talleres sobre temas dedicados a conocerte y fortalecerte personalmente, conoceras el caso de otras personas y te darás cuenta que eres uno más. Uno que tiene su bache, su empujón que darle a la vida, pero que ahora es mucho más capaz de conocerse a sí mismo y valorarse en lo que le corresponde.

Y no sólo en las terapias de grupo, que recomiendo especialmente, sino también hay otras técnicas además del conocido psicólogo. Hay distintas escuelas psicoanalítica, cognitivo conductual, la famosa Gestalt, está la nueva tendencia positiva del coaching que ya se utiliza para la vida personal, etc. Busca lo que más vaya con tu forma de ser, lo que de verdad notes que concuerda contigo y te ayuda. Hay miles de sitios para formarse y para hablar de tu tema con otros, para deshilar la madeja, para que te quede sóla y exclusivamente la pequeña proporción de lo que te ocurre que tú no puedes controlar.

De vez en cuando, descansa. Si has estado un año trabajando en ti, para unos meses y aprecia lo que has aprendido, fíjate en lo que hacías y ya no haces o en lo que has conseguido hacer y antes te era imposible, en lo que has comprendido y antes no sabías...

Trabaja en ti, te servirá para todos los momentos de tu vida.